Los portátiles ya no son lo que eran: estábamos acostumbrados a sacrificar buena parte de las prestaciones que ofrecían los PCs de sobremesa cuando nos íbamos a un equipo portátil, pero hace tiempo que eso dejó de ser cierto, y ASUS y NVIDIA vuelven a recordárnoslo con un nuevo y potente lanzamiento cuyo precio, aún por confirmar, puede ser astronómico: solo su gráfica cuesta 4.000 dólares.
Se trata del ASUS ProArt StudioBook One, una estación de trabajo portátil que destaca por muchas cosas pero sobre todo por la inclusión de una gráfica dedicada NVIDIA Quadron RTX 6000 nunca antes vista fuera de los PCs de sobremesa. Eso dota a este equipo de una potencia fantástica aplicable al diseño 3D, la aceleración de tareas de inteligencia artificial y por supuesto al trabajo con ray-tracing.
El lanzamiento de las Quadro RTX 6000 hizo que una vez más las estaciones de trabajo de sobremesa contaran con una opción un escalón por encima de lo que podíamos tener en equipos portátiles, pero eso cambia con la llegada de este equipo.
ASUS ProArt StudioBook One | |
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Pantalla | 15,6 pulgadas, 4K, 120 Hz |
Procesador | Intel Core i9-9980HK |
Tarjeta gráfica | NVIDIA Quadro RTX 6000 (24 GB GDDR6) |
RAM | 64 GB DDR4 |
Almacenamiento | SSD 1 TB m.2 NVMe |
Sistema operativo | Windows 10 Pro |
Batería | 90 Whr |
Puertos | 3 x USB-C (Thunderbolt 3) |
Conectividad | Wi-Fi 802.11ac 2x2, Bluetooth 5.0 |
Dimensiones | n.d. x n.d. x 25 mm |
Peso | n.d. |
Precio | n.d. |
Esa tarjeta gráfica con unos prodigiosos 24 GB de memoria gráfica GDDR6 es sin duda protagonista en una configuración que brilla en otros apartados como el procesador Intel de 9ª generación o los 64 GB de RAM que acompañan a estos componentes.
Las pruebas internas de ASUS y NVIDIA revelan que aunque hay una ligera pérdida de rendimiento del 10% con respecto a un equipo de sobremesa con una configuración muy similar, una diferencia casi desdeñable teniendo en cuenta la versatilidad que ofrece el equipo de ASUS.
La pantalla de 15,6 pulgadas con resolución 4K y soporte de tasas de refresco de 120 Hz es otro elemento clave para disfrutar de una experiencia de trabajo sobresaliente en todo tipo de escenarios. Esa pantalla llega calibrada de fábrica con un soporte del 97% del gamut DCI-Pr y con un Delta E < 1 que garantiza una precisión del color excepcional.
Todo en un equipo de 15,6 pulgadas que es sorprendentemente delgado (alrededor de 25 mm de grosor) y compacto para todo lo que integra en su interior. El equipo de ASUS forma parte de ese grupo de portátiles que cumplen con los requisitos del programa RTX Studio de NVIDIA: ya hay 12 portátiles con esa "certificación" y 39 sistemas en total (PCs de sobremesa incluidos).
Los ingenieros de ASUS han trabajado en conjunción con NVIDIA para seguir el diseño de referencia "ACE" propuesto hace tiempo por la compañía liderada por Jen-Hsun Huang.
En ese diseño una de las claves es el sistema de refrigeración con "cámaras de vapor" fabricadas con titanio y que son capaces de refrigerar la potencia generada por un equipo con una fuente de alimentación de 300 W que también destaca por su adaptador, que tiene la mitad del tamaño habitual en adaptadores de corriente para equipos de este ámbito.
En esa tecnología de refrigeración también hay un componente software importante. Se trata de la tecnología Optimus de NVIDIA que permite activar o desactivar la gráfica dedicada y hacer así que en usos "ligeros" del equipo como la navegación web o el trabajo con documentos ofimáticos solo tengamos activa la gráfica integrada como parte del procesador de Intel. De este modo la eficiencia y la autonomía de la batería se maximizan.
De momento no tenemos ni el precio ni la fecha de disponibilidad del nuevo ASUS ProArt StudioBook One, pero actualizaremos esta información en cuanto contemos con dichos datos. Es de esperar que ese precio sea muy elevado, sobre todo si tenemos en cuenta que una NVIDIA Quadro RTX 6000 ronda actualmente los 4.000 dólares en el mercado.
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