Qué tiempos aquellos en los que los Service Pack transformaban Windows XP en un sistema operativo nuevo y mejor. Las grandes actualizaciones de posteriores ediciones de Windows siempre lograron ese efecto en menor o mayor medida, pero la expectación por estos "service pack" (aunque ya no se llamen así) ha caído porque también lo ha hecho la cantidad de novedades y mejoras que llegan con ellos.
Es lo que ha ocurrido con la última actualización de Windows 10, llamada 'May 2020 Update', que integrará muchas pequeñas novedades pero pocas realmente destacables para los usuarios finales. Ciertamente es difícil iterar y plantear mejoras disruptivas en un sistema tan maduro como Windows 10, pero algunos usuarios echamos de menos esa expectación que generaban las promesas que hacía Microsoft con esas grandes actualizaciones que ya no son tan "grandes".
En la gran actualización de noviembre de 2019 la gran novedad estuvo en un mayor control sobre las notificaciones. Antes, en la gran actualización de mayo de 2019, llegaba el tema luminoso y un interesante # rel="nofollow" target="_blank" href="http://">.
En Redstone 5, que acabó llamándose Windows 10 October 2018 Update, destacaba el tema oscuro del explorador de Windows, la nueva herramienta de capturas o la aplicación Your Phone. Y en abril tuvimos Redstone 4 ?Windows 10 April 2018 Update? que llegaba con el curioso Windows Timeline (¿la usáis?) y el prometedor soporte de aplicaciones web progresivas (PWA).
En todas esas actualizaciones las novedades iban más allá, por supuesto. A todas ellas se sumaban esos parches y correcciones de errores que permitían solucionar vulnerabilidades y conflictos y que, ojo, son parte esencial del buen funcionamiento y probablemente más importantes en esencia que cualquier nueva característica.
Lo mismo se plantea en Windows 10 May 2020 Update (con nombre en clave "20H1"), una actualización que traerá un buen montón de pequeñas mejoras que son importantes pero que desde luego no son una revolución. Cortana se separa de Windows 10, tendremos mejor control sobre las actualizaciones o la GPU y podremos reinstalar Windows desde la nube.
Hay de hecho muchas más novedades que Microsoft detalla en su documentación, y de hecho allí se da relevancia especial a varias de las mejoras del sistema Windows Subsystem for Linux 2 (WSL 2), que contará por ejemplo un nuevo kernel Linux y un montón de nuevas características que sin duda serán muy bien recibidas por los que se benefician de esa integración entre Windows 10 y Linux.
La crítica a este tipo de filosofía es fácil: Windows 10 ya no aporta demasiados argumentos para sorprendernos y causar expectación respecto a una nueva característica o función. Este sistema operativo parece ser el mismo de siempre actualización tras actualización.
Eso que parece aburrido quizás sea lo mejor que le pueda pasar a Windows 10, que con casi cinco años a sus espaldas se ha convertido en un sistema operativo maduro y eficiente.
¿Es perfecto? Desde luego que no: sigue habiendo algunos problemas e incoherencias inexplicables ?el panel de control sigue ahí junto a la Configuración de Windows por alguna razón?, pero es evidente que quienes trabajan en Windows 10 siguen esforzándose por lograr que este sistema operativo sea un poquito mejor tras cada gran actualización.
El desarrollo de Windows 10 es desde hace mucho tiempo muy colaborativo: no solo por la existencia de los Windows Insiders ?cualquiera puede serlo? que prueban nuevas versiones preliminares antes que el resto de usuarios y dan sus comentarios al respecto, sino porque también pueden proponer nuevas características.
La plataforma UserVoice dejaba hacerlo en el caso de Windows 10, pero desde hace un tiempo ese foro de discusión no está disponible aunque sí lo está por ejemplo (y de forma muy activa) el de Microsoft Teams o el de Office 365.
Afortunadamente hay una opción integrada en Windows 10, el llamado Centro de Opiniones que quizás alguno hayáis usado y que es una buena forma de ayudar a que Windows 10 sea un poquito mejor con informes de fallos o sugerencias de nuevas características. No facilita demasiado la visualización de sugerencias y votar en unas u otras, pero es una buena forma de participar y se une a otras como la comunidad de Windows en la que hay también una activa conversación en distintos frentes.
Probablemente a parte de los usuarios de Windows 10 les encantaría aquella vieja sensación que los Service Pack transmitían en tiempos de Windows XP, Vista o 7: la de que con ellos el sistema operativo de repente era distinto y, sobre todo, mejor.
Eso ya no ocurre, pero viéndolo con perspectiva esa es una excelente señal: si esos Service Pack hacían que aquellas ediciones de Windows fueran tan distintas o tan buenas era precisamente porque la calidad de aquellas ediciones en algunos apartados no era muy bueno. Que Windows 10 no cambie demasiado ni sufra revoluciones se debe precisamente a que en muchos de sus apartados la calidad ya es estupenda.
Así pues, que Windows 10 no necesite esas grandes revoluciones hace que su evolución, aunque menos explosiva y llamativa, sea más pausada y pueda ir cubriendo áreas que ganan interés.
Las mejoras iterativas, después de todo, no están nada mal.
Imagen | Reddit
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