Sorprende la cantidad de personas que no han probado otro servicio de correo electrónico que no sea el omnipresente Gmail de Google. Desde que debutó en 2004 ha ido acaparando más y más mercado creando todo un ecosistema de aplicaciones e interconexiones con otros servicios. No por ser el más grande es el mejor, muchos han intentado arreglar la experiencia de uso con apps y flujos de trabajo que maquillan la base de Gmail. Otros, como los creadores de HEY, quieren romper directamente con ello y volver a la esencia del correo electrónico, pero esto tiene un precio.
En cuanto a tecnología se refiere, tengo varias obsesiones. Una de ellas y siempre de la mano de los gestores de tareas es la de los gestores de correos. El flujo de trabajo, el diseño y las apps, la privacidad, la integración con otros servicios... hay muchos factores que tener en cuenta a la hora de decidir cómo gestionar tus correos electrónicos. Si apuestas por Gmail tienes decenas de opciones en apps e integraciones, pero sabiendo que lo haces bajo el manto de Google. Si escoges otras opciones como Proton Mail que alardean de privacidad te ves limitado en integraciones con el resto de servicios. Y así con prácticamente cualquier opción.
HEY, como tantos otros, promete una reinvención del correo electrónico. Hay una razón de peso para darles un voto de confianza: el bagaje e historial de sus fundadores. Es por ello que durante meses he estado siguiendo de cerca el desarrollo y el actual lanzamiento de HEY. Ahora finalmente HEY he hecho públicas todas sus características y ha abierto una beta privada a la que se accede por invitación. Veamos qué ofrece.
HEY es una plataforma de correo electrónico, esto significa que no se trata simplemente de una app donde sincronizar tu cuenta de Gmail, Outlook u otros servicios, se trata de un servicio de por si con sus propias direcciones tipo nombre@hey.com y apps para móviles, tablets, escritorio y web. Con esta construcción prácticamente desde cero HEY puede imponer sus propias reglas de funcionamiento sin depender de plataformas o servicios de terceros. ¿El resultado? Unas cuantas ideas bastante radicales sobre cómo tratar el correo y flujos de trabajo nuevos que prometen un control absoluto para el usuario.
Lo primero que nos encontramos al hacernos la cuenta es que debemos escoger una nombre para la cuenta, esta sera nuestra nueva dirección de correo electrónico y acabará en @hey.com (la historia de cómo consiguieron el dominio hey.com, por cierto, es de lo más interesante). Siendo un servicio nuevo muchos nombres de usuario simples están disponibles, así que es probable que puedas hacerte con tu nombre fácilmente. Una vez la cuenta está creada podemos comenzar a recibir correos y enviar correos en nombre@hey.com, de hecho si queremos podemos directamente redirigir correos de otras cuentas aquí, aunque eso ya se configura por separado en cada servicio externo.
Hay un total de seis partes importantes dentro de HEY, lo mejor es ver cada una de ellas para entender y tener una panorámica completa del funcionamiento de HEY:
Imbox: No es un error gramatical, han decidido llamar a la bandeja de entrada Imbox y no Inbox porque es donde llegan los correos "IMportantes". Pero no hay mucho misterio, realmente funciona como una bandeja de entrada tradicional, donde llegan los correos que nos interesa. Sí que es cierto que no llegan todos, ahora veremos por qué. The Feed: Pensado para newsletters y otros correos promocionales no tan relevantes. Se muestran en una especie de timeline con todos abiertos, para que podamos ir pasando y leyendo cómodamente.
Paper Trail: Aquí van a parar correos que son confirmaciones de compra, facturas, notificaciones y similares. Reply Later: Todos los correos que nos interesa contestar más tarde, con la ventaja de que aparece directamente en un lateral el cuadro de texto para contestar y en todos a la vez. Es decir, permite contestar rápidamente a todos sin ir buscando uno a uno ni entrando en cada hilo de coreos por separado. Set Aside: Básicamente correos que guardamos para tener a mano siempre que nos hagan falta. All Files: Muestra en una cuadrícula todos los archivos e imágenes que vamos recibiendo en los correos. Permite filtrar por tipo de archivo o según quién los ha enviado.
Ahora bien, ¿quién elige dónde va cada uno de los correos? Tú. No hay inteligencia artificial alguna que se dedique a analizar si interesa un emisor como importante o si se trata de una promoción. Una vez elegimos por primera vez dónde nos interesa un tipo de correo, HEY colocará los siguientes ahí automáticamente. Pero lo más curioso de todo es 'The Screener', esta sección de HEY es donde llegan todos los correos de personas que nos escriben por primera vez. Es ahí donde escogemos si queremos que los correos de dicha persona o empresa nos lleguen o no, si decidimos que no esos emisores irán a parar a 'Screened Out', una especie de lista negra.
Hay muchas otras funciones menores para tomar el control del corro, podemos por ejemplo asignar asuntos a correos que no tienen, silenciar hilos o emisores, unificar varios hilos de correos, ignorar hilos molestos... Hasta puedes tener una palabra secreta para que te envíen correos sin pasar por el filtro de The Screen. Es cuestión de ir descubriendo la plataforma.
He querido dejar para el final una de las características estrella de HEY y que más han promocionado sus creadores: la privacidad. HEY, según ellos, no lee tus correos ni comparte ningún tipo de datos fuera de la plataforma. Pero aparte de eso también lucha de forma activa para evitar que otros sepan cómo usas el correo. Por ejemplo, bloquea los píxeles de seguimiento que algunos emisores colocan para saber si has leído o no el correo. Si un correo viene con seguimiento HEY lo bloquea y te avisa de la tecnología que han utilizado para espiarte, así como información que han tratado de obtener con esa tecnología.
Tienen hasta un "muro de la vergüenza" para aquellos servicios a los que bloquea sus píxeles de seguimiento. Personalmente no me molesta tanto que un emisor coloque su píxel de seguimiento para que sepa si abro o no su correo. No porque esté a favor de la práctica, sino porque directamente prefiero que se entere de que he abierto su correo y no lo he respondido adrede.
Detrás de HEY se encuentra Basecamp, una startup tecnológica que ofrece gestión de proyectos en grupos y organización para empresas en remoto. Sus fundadores son Jason Fried y David Heinemeier Hansson, que siempre han defendido la idea de que Basecamp sigue sus propios principios para diferenciarse de las grandes tecnológicas, han aplicado esto a HEY.
Jason Fried y en especial David Heinemeier Hansson no se han callado en los últimos años sobre algunas prácticas de las grandes tecnológicas. Por poner algunos ejemplos después de que saliera a la luz Cambridge Analytica tomaron la decisión de hacer su negocio "Facebook-free". Basecamp se desvinculó totalmente de Facebook eliminado anuncios en la plataforma de Zuckerberg, el registro mediante Facebook o sus perfiles como empresa en Facebook. Por otro lado, David protagonizó recientemente una de las últimas polémicas de Apple con su tarjeta de crédito Apple Card y el presunto sexismo del algoritmo a la hora de conceder créditos. Adicional, sólo hay que echar un vistazo a varios libros que han publicado sobre trabajo en remoto y emprendimiento para entender cómo les ha funcionado ir a contracorriente de lo que hacen los gigantes de la industria.
Jason y David indican que el correo electrónico no es el problema, a pesar de que sea lo que nos han hecho creer durante años (ahí está Slack y otras tantas empresas tratando de matar el correo electrónico). "El software de correo electrónico moderno está lleno de características, pero vacío de filosofía", argumentan.
El ejemplo de cómo tratan a las herramientas de seguimiento y rastreo de correos es una prueba de la filosofía que han implementado en HEY. Pero no la única, tampoco ofrecen por ejemplo herramientas de importación de correos, con la idea de empezar de cero y no llenar HEY de correos antiguos traídos de otras plataformas. Y muchas otras características que no se ofrecen adrede: no todos los correos tienen la marca de leído o no leído, no se archivan los correos, no hay forma de conseguir "inbox zero", no hay notificaciones en las apps, no hay firmas en los correos...
Horas han necesitado en HEY para involucrarse en una nueva polémica, de la mano de Apple. La aplicación para iPhone fue publicada en el App Store en el momento en el que HEY fue hecho público, horas más tarde decidieron mandar una actualización con pequeñas correcciones de errores y... Apple ha rechazado la aplicación. ¿Motivo? No cumplir con las reglas de el App Store al vender un servicio sin pasar por el App Store. Pero claro, HEY no vende nada en su app para iPhone.
Apple se lleva entre el 30% y el 15% de los ingresos de todas las compras que se realizan en apps de el App Store. Esta comisión se aplica a la compra de apps y juegos, pero también a las compras internas de estas apps o a las suscripciones que ofrecen. Como resultado muchos servicios han preferido no ofrecer compras dentro de la app y darlas mediante su web externa u otros métodos. Esto es algo que el App Store permite siempre y cuando no pida al usuario que haga la compra fuera de la app o directamente lo redirija fuera de la app.
Wow. I'm literally stunned. Apple just doubled down on their rejection of HEY's ability to provide bug fixes and new features, unless we submit to their outrageous demand of 15-30% of our revenue. Even worse: We're told that unless we comply, they'll REMOVE THE APP.
— DHH (@dhh) June 16, 2020
Los creadores de HEY, que ya tiene experiencia con Basecamp, desde un primer momento no han ofrecido opción para pagar por HEY dentro de la app de iOS. Tampoco hay ningún tipo de indicio de que el usuario debe pagar fuera por el servicio. Esto ha incendiado a DHH, que ve esto como un abuso por parte de Apple al ser competencia de su servicio de correo electrónico. Asegura que antes acabara con todo que ceder ante "gangsters como este". Están pidiendo a los usuarios descargar la app antes de que Apple la retire. Apple ha indicado a Protocol que aceptarla en un primer momento fue un error.
Justamente esta semana la Comisión Europea ha iniciado una investigación antimonopolio contra Apple por el App Store y Apple Pay. En Estados Unidos también tienen un ojo puesto en este tema.
En pleno 2020 y después de grandes polémicas como Cambridge Analytica los usuarios de Internet son más conscientes de que valoran su privacidad. La pregunta es si están dispuestos a pagar por ello. Todos los servicios de correo electrónico gratuito se financian de algún modo u otro, bien con servicios adicionales de la empresa bien con prácticas menos éticas como vender datos a terceros. HEY precisamente va en contra de todo eso, anuncian desde un primer momento que se trata de un servicio de pago.
"Hemos hecho un gran producto, tú pagas un precio razonable por ello ? eso es justo para todos", esa es la premisa de los creadores de HEY a la hora de ofrecer su servicio. HEY es un servicio de correo electrónico de pago con una cuota de 99 dólares al año. Adicionalmente ofrece 14 días de prueba gratuita. A cambio de 99 dólares al año nos ofrece la dirección @hey.com, las apps y acceso a la plataforma y 100 GB de almacenamiento entre otras cosas. En el caso de dejar de pagar por el servicio no tendremos más acceso a los correos, pero permite exportar los existentes, los contactos y redireccionar automáticamente futuros correos de esa dirección a una externa.
¿99 dólares al año por el correo electrónico es mucho? Aquí es ya criterio de cada uno y del uso que le va a dar realmente. Pero si te parece mucho el precio aún puede subir más en caso de que escojas una dirección de sólo tres o dos letras, sube a 349 dólares al año y 999 dólares al año respectivamente. Caro o no, lo que HEY es seguro es un recordatorio de que los productos bien hechos tiene un precio, también en el mundo digital.
Más información | HEY
.