En los últimos años hemos visto despegar iniciativas de internet satelital, como Starlink (SpaceX), Kuiper (Amazon) o OneWeb. Ahora vamos a tener que sumar un nuevo agente, que no es otro que la propia Unión Europea, que ha anunciado sus planes para crear un "sistema de comunicación segura de la UE".
El objetivo, afirman desde la Comisión Europea, es desarrollar un servicio que permita un acceso ininterrumpido y seguro a la red, así como llevar la conexión a las "zonas muertas de comunicación, garantizado la cohesión entre los Estados Miembros". ¿El coste total estimado de este proyecto? 6.000 millones de euros.
Tal y como ha detallado la Comisión Europea en un comunicado, esta iniciativa contribuirá a "salvaguardar la eficacia y seguridad de nuestros activos actuales, al tiempo que desarrollarán la tecnología espacial europea de vanguardia y nuestra economía". Según la CE, la conectividad basada en el espacio es un "activo estratégico" para la resistencia de la UE, de ahí que vaya a apostar por desarrollar su propia propuesta. En palabras de la entidad, este sistema:
"Garantizará la disponibilidad a largo plazo de un acceso mundial ininterrumpido a servicios de comunicación por satélite seguros y rentables. Apoyará la protección de infraestructuras críticas, la vigilancia, las acciones exteriores, la gestión de crisis y las aplicaciones fundamentales para la economía, la seguridad y la defensa de los Estados miembros;
Permitirá la prestación de servicios comerciales por parte del sector privado que puedan permitir el acceso a conexiones avanzadas, fiables y rápidas a los ciudadanos y empresas de toda Europa, incluso en las zonas muertas de comunicación, garantizando la cohesión entre los Estados miembros. Este es uno de los objetivos de la propuesta Década Digital 2030. El sistema también proporcionará conectividad en zonas geográficas de interés estratégico, por ejemplo, África y el Ártico, como parte de la estrategia del Portal Global de la UE".
La Comisión Europea estima que el coste total será de unos 6.000 millones de euros. La contribución de la Unión Europea a este programa será de 2.400 millones de euros desde 2022 hasta 2027. Entre las fuentes de financiación están el presupuesto de la UE, los Estados Miembros, la contribución de la ESA y las inversiones del sector privado, por lo que estamos hablando de una iniciativa público-privada.
Aunque el coste sea elevado, la UE espera que el desarrollo de esta infraestructura sume un valor añadido de entre 17.000 y 24.000 millones de euros y puestos de trabajo adicionales en la industria espacial europea, además de "otros efectos indirectos positivos" derivados del acceso a la conectividad satelital. Esta constelación, todavía por definir, complementará a las dos redes actuales: Galileo y Copernicus.
Evidentemente, la seguridad será uno de los pilares de este sistema. Por ello, desde la UE quieren integrar a la European Quantum Communication Infraestructure (EuroQCI) para "habilitar la transmisión segura de claves criptográficas".
En cuanto a ventanas de lanzamiento, el desarrollo está programado para entre 2023 y 2024. Entre 2025 y mediados de 2027 se lanzará la fase inicial del servicio y se espera que a finales de 2027 el sistema esté completamente operativo.
Cabe recordar que la Comisión Europea lanzó en diciembre de 2020 un sistema inicial para explorar los aspectos técnicos y los posibles modelos de prestación de servicios. En diciembre de 2021, por su parte, se adjudicaron dos contratos y, si bien es cierto que el trabajo técnico sigue en marcha, se espera que haya resultados para junio de 2022.