Llevamos tres meses desde que se dio la orden de dejar en tierra a los aviones Boeing 737 MAX, esto tras sus dos accidentes fatales que provocaron la muerte de 346 personas en menos de cinco meses. Esta semana, con motivo del arranque del Salón Aeronáutico de París 2019, Boeing abrió su conferencia con un "lo sentimos" y la promesa de que el MAX volverá al aire.
Durante una entrevista a Bloomberg, Greg Smith, director financiero de Boeing, afirmó que en la compañía están considerando varias estrategias para "limpiar" el nombre del 737 MAX y que no esté asociado a accidentes. Entre estas estrategias está el cambiarle de nombre.
Smith explicó que Boeing está dispuesta a abandonar la marca 'MAX', pero esto dependerá de las evaluaciones a las respuestas de los consumidores y las mismas aerolíneas.
"Estamos siendo abiertos a todas las opiniones que recibimos. Estamos comprometidos a hacer lo que sea necesario para restaurarla (la confianza). Y si eso significa cambiar la marca, entonces nos ocuparemos de eso. Si no, nos haremos cargo de lo prioritario."
De hecho, esta idea del rebranding no es nueva, ya que el pasado mes de abril, cuando el 737 MAX apenas cumplía un mes de haber detenido sus operaciones, el presidente Donald Trump sugirió que lo mejor sería cambiar el nombre el avión y hacer un relanzamiento con nuevas características.
What do I know about branding, maybe nothing (but I did become President!), but if I were Boeing, I would FIX the Boeing 737 MAX, add some additional great features, & REBRAND the plane with a new name.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 15 de abril de 2019
No product has suffered like this one. But again, what the hell do I know?
Por su parte, CNN también entrevistó a Smith, quien declaró lo siguiente:
"Las palabras simplemente no pueden expresar el dolor y la simpatía que sentimos por las familias y los seres queridos de aquellos que se perdieron en estos trágicos accidentes. Hemos estado trabajando con la FAA y los reguladores de todo el mundo para asegurarnos de que estamos respondiendo a todas las preguntas y abordando cualquier preocupación que se pueda tener."
Tras la entrevista con Smith, Boeing envió una declaración a Bloomberg para aclarar algunos puntos. Por ejemplo, que sí están abiertos a un cambio de nombre pero por el momento no hay planes concretos, así como hacer énfasis de que ahora mismo la prioridad es la seguridad.
"Nuestro objetivo inmediato es el regreso seguro del MAX al servicio y la recuperación de la confianza de las aerolíneas y del público que viaja. Seguimos abiertos a todas las opiniones de los clientes y otras partes interesadas, pero por el momento no tenemos planes de cambiar el nombre del 737 MAX."
Ahora mismo no está claro cuándo volverá a volar el 737 MAX, ya que eso dependerá de los reguladores globales quienes deberán aprobar los cambios a los sistemas de seguridad y la actualización de software. Sin embargo, Boeing insiste en que está trabajando en todos los frentes para tratar de anticiparse a posibles escenarios.
Entre estas acciones está la de American Airlines, quien aseguró que el vuelo de prueba tras la aprobación de los cambios al 737 MAX será realizado con los ejecutivos y directores de la compañía como pasajeros, esto con el objetivo de restaurar la confianza. Según American Airlines, están convencidos de que el avión es seguro y la recertificación llegará pronto.
Por otro lado, el grupo IAG (International Airlines Group), del que forman parte Iberia, British Airways, Vueling y Aer Lingus, acaba de realizar un pedido de 200 aviones 737 MAX, respaldando así a Boeing. Hay que destacar que el por momento es una "carta de intención" y está sujeta a un acuerdo formal.
Estas 200 aeronaves serían entregadas entre 2023 y 2027 y en caso de concretar la compra, se trataría de la mayor venta desde que el 737 MAX detuvo sus operaciones en marzo este año.
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