Tremendo caos de nombres que vamos a tratar de explicar. Fisker Automotive era un fabricante estadounidense cuyo único coche fue el Fisker Karma, uno de los primeros híbridos enchufables del mundo que salió a la venta en 2012. Ya en 2013, Fisker se declaró en bancarrota y llegaron los chinos a comprar la compañía con el objetivo de relanzar la marca y nuevos coches. Así es como nació Karma Automotive, quien acaba de presentar el Karma SC1 Vision Concept, que será el primer coche eléctrico de la compañía.
Aclarado el punto, el SC1 Vision de Karma se nos presenta con un coche eléctrico deportivo que se destaca por tener puertas con un diseño de apertura vertical, y que describen como una "declaración sobre la dirección de la futura oferta de productos de Karma tanto en tecnología como en diseño".
Tras la quiebra de Fisker, todos los activos del fabricante, incluido el proveedor de baterías A123, fueron adquiridos por el Grupo Wanxiang, un conglomerado chino de autopartes, y pusieron al frente al Dr. Lance Zhou, el actual CEO de Karma Automotive. Un punto curioso, es que la compañía se sigue promocionando como estadounidense, cuando casi todos sus lazos son con China.
Durante el próximo Concurso de Elegancia de Pebble Beach, que se celebrará en unos días, Karma mostrará al mundo este Karma SC1 Vision Concept. Aunque se trata de un concepto que aún no tiene planes de salir a producción, nos muestra las líneas de diseño y tecnología que está adoptando el fabricante para sus futuros proyectos.
La compañía no ha ofrecido especificaciones técnicas de este SC1 Vision, pero sí adelantó aspectos tecnológicos que lo preparan para el futuro ya que también estaría listo para equipar una plataforma de conducción autónoma, según Karma.
Por esa razón se habla de que contará con conectividad 5G, que estará disponible tanto comunicaciones V2V como para el sistema de infoentretenimiento y actualizaciones OTA, pantallas e interfaces táctiles, así como una plataforma de inteligencia artificial para gestionar un sistema de seguimiento ocular y voz.
Según Karma, el coche integrará una cámara en la cabina, justo frente al conductor, que servirá para monitorizar su actividad de acuerdo a sus ojos, desde mirada y párpados, para así determinar si la persona está fatigada o en condiciones para hacerse cargo del vehículo. En caso de que se detecte alguna anomalía, el coche se detendría y llamaría a los servicios de asistencia.
Adicional a esto, el SC1 Vision contaría con ocho radares, seis sensores Lidar y seis cámaras externas, lo que darían un alto nivel de autonomía al coche. Claro, cuando el software esté listo, ya que Karma no ha dado detalles del nivel de autonomía con el que contaría.
El Dr. Lance Zhou, CEO de Karma, mencionó:
"El SC1 es una señal del futuro de Karma. Diseñado y fabricado en menos de 12 meses, el SC1 es un vehículo eléctrico de batería completa que explora el llamativo lenguaje de diseño de la marca y la integración de tecnología innovadora posible a través de nuestra estrategia de colaboración de plataforma abierta".
En los próximos días se espera tener más detalles de este y los otros dos coches de Karma, los cuales sí saldrán a la venta, así como los planes de la compañía para los próximos años.